El rotomoldeo, también conocido como moldeo rotacional, es un proceso versátil de conformado de plásticos que se utiliza para fabricar productos huecos, sin juntas y duraderos. Durante el proceso de rotomoldeo, el polvo de plástico se calienta dentro de un molde giratorio que gira alrededor de dos ejes perpendiculares. Esta distribución uniforme garantiza un espesor de pared homogéneo y una excelente resistencia estructural. A medida que evoluciona la tecnología de fabricación, el rotomoldeo continúa avanzando. Gracias a las constantes innovaciones en materiales y automatización, el rotomoldeo es cada vez más eficiente energéticamente y adaptable a diversas aplicaciones industriales.

Comprender la historia del moldeo rotacional ayuda a profundizar en el conocimiento de esta técnica. El proceso se remonta a principios del siglo XX, cuando se utilizaba para crear bombones huecos. En la década de 1940, el moldeo rotacional se adoptó en la fabricación de plásticos, lo que impulsó un rápido crecimiento en el sector industrial. Hoy en día, los productos moldeados por rotación se utilizan en industrias como la automotriz, la agrícola y la de la construcción, gracias a las continuas mejoras en la tecnología de moldeo rotacional.

• Rentable: Los moldes utilizados en el moldeo rotacional son menos costosos que los utilizados en otros procesos de moldeo.
• Flexibilidad de diseño: El proceso de rotomoldeo admite diseños complejos, estructuras de doble capa y espesores de pared variables sin necesidad de juntas ni uniones.
• Durabilidad: Los productos rotomoldeados son conocidos por su resistencia y longevidad.